El Cavall Verd o sierra del Penyó se encuentra situado en La Vall de Laguar, y delimita la parte meridional del término municipal, sirviendo de divisoria de los ríos Xaló-Gorgos y Girona. Así mismo, constituye el límite de los términos de Murla y Benigembla, sobre los cuales recae la parte solana de la sierra.

Formada por rocas calcáreas y margas cretácicas del Senoniense, llega a los 826 metros a la Perereta (coronada con una cruz de término) y a los 843 metros a la Penya de l’Alt. En el Pla dels Avencs encontramos una zona kárstica rica en cuevas y simas.

Los Penyons de Laguar, famosos por haberse librado allí la última batalla antes de la expulsión morisca de 1609 y actualmente símbolos gráficos del valle, llegan a los 789 metros de altitud.

Cuenta la leyenda morisca que la sierra se encontraba hundida porque, siglos antes, luchando contra el ejército del rey Jaime I, un gigante y poderoso guerrero denominado Alfatami había caído allí con su caballo de color verde, quedando ambos sepultados. Pero que, llegado el momento, guerrero y corcel resucitarían para defender los moriscos de los cristianos si estos se atrevían a volver a invadir el valle.

En la parte de la sierra que recae sobre el término de La Vall de Laguar son frecuentes los manantiales y fuentes, cuyas aguas acaban en numerosos barrancos que la cruzan transversalmente.

En la solana y en el sector más occidental de la sierra, localizamos el barranco de Moragues con la fuente de la Mata y el barranco de las Carrasques, donde hay una fuente que lleva el mismo nombre. Los dos barrancos llegan hasta el río Xaló-Gorgos, en las proximidades de la carretera de Benigembla a Castell de Castells.

En la umbría y en las áreas central y oriental de la sierra encontramos el barranco de los Olbis, con una fuente con el mismo nombre; el barranco de Font de la Figuera, el de Can Torres y el de la Font Grossa, este último en las proximidades de Fleix; finalmente, el barranco de las Hortes, que lleva las aguas de la fuente del Gel y de las fuentes de Campell, en las proximidades de este núcleo. Todos estos barrancos de la parte central desembocan sus aguas en el río Girona. En la parte baja de la vertiente de la sierra se encuentran zonas de cultivo de cerezos muy importantes, con unas condiciones óptimas de humedad y altitud.