La cueva Bolumini fue utilizada como lugar habitacional y, durante el Bronce antiguo, como lugar de entierro. Se ha documentado la existencia de arte rupestre en el interior, concretamente varias líneas pintadas en una columna natural. Este tipo de manifestaciones artísticas se han relacionado con el mundo espiritual de los primeros pobladores de estas tierras, y son uno de los indicios que nos llevan a pensar que la cueva pudo tener función de santuario. Además, en el solsticio de verano y en los días anteriores y posteriores, al poco de comenzar el día, la luz del sol se introduce en la cueva, fenómeno luminoso que hace de esta un lugar muy especial.